Si lo haces, serás recompensado; tu esperanza no se frustrará. PROVERBIOS 23:18
A todos nos han decepcionado muchas veces en nuestra vida. La verdad pura y dura es que siempre que deseamos algo, nos arriesgamos a frustrarnos y decepcionarnos. Todos hemos aprendido esta lección por las malas demasiadas veces, así que es natural que nos preparemos para la decepción cuando soñamos con algo.
Pero hay una esperanza que nunca se pierde. Da igual cuánto tiempo estemos esperando o lo distante que nos pueda parecer el cumplimiento de nuestra esperanza: si depositamos nuestra fe en Dios, no nos decepcionaremos. Algún día veremos claramente el resultado de nuestra fe en este reino venidero. La confianza que hemos puesto en sus promesas será recompensada y nuestros corazones no serán decepcionados.
Oración:
Señor Jesús, gracias porque tú cumplirás la esperanza que tengo puesta en ti. Muchas cosas y personas en mi vida me han decepcionado, pero sé que contigo esto no pasará. Gracias porque mi corazón está a salvo contigo.
Hope That Doesn’t Disappoint
You will be rewarded for this; your hope will not be disappointed. PROVERBS 23:18
We’ve all been disappointed numerous times in our lives. The hard truth is that whenever we hope for something, we put ourselves at risk to be let down. We’ve all learned this lesson the hard way too many times to not brace ourselves for disappointment in our dreaming.
But there is one hope that will never be lost. No matter how long we find ourselves waiting, or how distant the fulfillment may seem to us—when we put our faith in God, we will not be let down. We will someday clearly see the result of our belief in his coming kingdom. The trust we’ve placed in his promises will be rewarded, and our hearts will not be disappointed.
Prayer:
Lord Jesus, thank you that you will fulfill my hope in you. I have been disappointed by many people and things in my life, but I know that you won’t let me down. Thank you that my heart is safe with you.