El Señor es mi roca, mi baluarte y mi libertador; mi Dios, mi roca en quien me refugio; mi escudo y el cuerno de mi salvación, mi altura inexpugnable. SALMO 18:2 (LBLA)
Nunca sabemos cómo reaccionaremos cuando nos golpee la tragedia, cuando las cosas escapen a nuestra comprensión o cuando nos enfrentemos a una circunstancia que no podemos cambiar. ¿Qué podemos hacer para prepararnos? Pues, en el mundo físico, no demasiado. Pero podemos podar nuestros corazones.
Podemos pedirle a nuestro Padre una dependencia total de él. Podemos comprender todavía más la profundidad y la anchura y la longitud de su amor por nosotros, para que cuando nos enfrentemos a la incerteza podamos aferrarnos a lo que sí que sabemos que es permanente:
Jesús.
Jesús es el cimiento definitivo. Es nuestra roca. Es nuestro puntal de fuerza cuando nos sentimos inestables y en medio de la incerteza. Cuando dudamos, él es nuestra respuesta. Cuando lloramos pidiendo ayuda, él nos consuela. Cuando preguntamos por qué, él nos susurra su plan para nuestras vidas.
Oración:
Señor, te necesito. Cuando las circunstancias escapan a mi control, me aferro a ti, mi puntal de fuerza.
Pillar in a Shaking World
The LORD is my rock and my fortress and my deliverer, My God, my rock, in whom I take refuge; My shield and the horn of my salvation, my stronghold. PSALM 18:2
We never know how we will react when tragedy strikes, when we are beyond our understanding, or when we are faced with an unshakeable circumstance. What can we do to prepare ourselves? Not much in the physical world. But we can prune our hearts. We can ask for total dependence on our Father. We can more fully understand how deep and wide and long his love is for us, so that when we are faced with uncertainty, we cling to what we know is certain—Jesus.
Jesus is our ultimate support. He is our rock. He is our pillar of strength when we feel unsteady and uncertain. When we question, he is our answer. When we cry out for help, he is our comfort. When we ask why, he whispers his truth of a plan for our lives.
Prayer:
Lord, I need you. When circumstances are beyond my control, I cling to you, my pillar of strength.
