“No os conforméis a las costumbres de este mundo, sino transformaos mediante la renovación de vuestra mente. Entonces podréis probar y aprobar cuál es la voluntad de Dios: su voluntad buena, agradable y perfecta”. Romanos 12:2
La mente es verdaderamente un campo de batalla. En qué centramos nuestros pensamientos tiene un profundo impacto en nuestro estado de ánimo y bienestar. Si no somos disciplinados en nuestra mente, no podremos sobrevivir a los muchos ataques que vienen contra ella por parte del mundo, de Satanás y de nosotros mismos. Dios tiene la solución: quiere que permanezcamos en Él.
¿Qué quiere decir esto? Significa leer y saborear Su Palabra, dejar que penetre profundamente en nuestros huesos para que cuando los pensamientos intrusivos vengan contra nosotros, tengamos un escudo. Tenemos una armadura para defendernos: la Palabra de Dios. He luchado contra la ansiedad y la depresión desde que tengo uso de razón.
Comenzó durante mi adolescencia y todavía me toma por sorpresa a veces en la edad adulta, pero he aprendido el secreto para combatirlo. Leo mi Biblia y oro a Dios pidiendo ayuda. Funciona todo el tiempo. Sé que no puedo luchar solo contra los ataques, así que tengo que correr hacia Él. E incluso cuando no veo cambios inmediatos en mi forma de sentir, sé que Dios está luchando por mí. Sé que no estoy solo.
El enemigo quiere aislarnos y hacernos sentir que somos los únicos que estamos pasando por algo, pero muchas veces hay muchos otros que lo entienden. He encontrado curación no sólo al clamar a Dios sino también al acercarme a los demás. No hay absolutamente nada de malo en pedir ayuda; de hecho, se necesita mucho coraje para hacerlo.
Preguntas de reflexión:
- ¿Tienes problemas con tu salud mental? ¿Cómo es eso? (Utilice un cuaderno para anotar su respuesta)
- Si respondiste sí a la primera pregunta, ¿qué estrategias puedes implementar para buscar la curación? ¿A quién puedes acudir para pedir ayuda?
(Utilice un cuaderno para anotar su respuesta)
Oración: Querido Señor, guarda mi mente. Protégeme de los ataques en su contra y dame las herramientas que necesito para luchar. Ayúdame a confiar en Ti incluso cuando no me siento bien. Recuérdame que no estoy solo y que Tú luchas por mí. Y dame el coraje para buscar ayuda de los demás. Gracias. Amén.
Your Mind
“Do not conform to the pattern of this world, but be transformed by the renewing of your mind. Then you will be able to test and approve what God’s will is—his good, pleasing and perfect will.”
Romans 12:2
The mind truly is a battlefield. What we focus our thoughts on has a profound impact on our mood and wellbeing. If we are not disciplined in our mind, we will not be able to survive the many attacks that come against it from the world, Satan, and our own selves. God has the solution—He wants us to dwell on Him.
What does this mean? It means reading and savoring His Word, letting it get deep down into our bones so that when the intrusive thoughts come against us, we have a shield. We have armor to defend ourselves: the Word of God. I have battled anxiety and depression for as long as I can remember.
It began during my teenage years and still catches me off guard sometimes in adulthood, but I’ve learned the secret of combating it. I read my Bible and pray to God for help. It works every time. I know I can’t fight against the attacks by myself, so I have to run to Him. And even when I don’t see immediate changes in the way I feel, I know that God is fighting for me. I know that I’m not alone.
The enemy wants to Isolate us and make us feel like we are the only ones going through something, but often there are many others who understand. I’ve found healing in not only crying out to God but by reaching out to others as well. There is absolutely nothing wrong with asking for help—in fact, it takes great courage to do so.
Reflection Questions:
- Do you struggle with your mental health? How so?
(Please use a notebook for journaling your response)
- If you answered yes to the first question, what strategies can you implement to seek healing? Who can you reach out to for help?
(Please use a notebook for journaling your response)
Prayer: Dear Lord, guard my mind. Protect me from attacks against it and give me the tools I need to fight. Help me to trust You even when I don’t feel okay. Remind me that I’m not alone and that You fight for me. And give me the courage to seek help from others. Thank you. Amen.