Nos predestinó para ser adoptados como hijos suyos por medio de Jesucristo, según el buen propósito de su voluntad, para alabanza de su gloriosa gracia, que nos concedió en su Amado. EFESIOS 1:5-6 (NVI)
Independientemente de lo que la vida te dé o te quite, una cosa es segura: eres hija de Dios y nada puede cambiar esa verdad. Él pagó un altísimo precio por tu alma. Te sientas digna o no de su amor, estás envuelta en él.
Él es un buen Padre. Le encanta ser bueno contigo. Él habita en tu alabanza y disfruta de tus oraciones. Hay muchísimo poder en comprender tu identidad como hija de Dios. Cuando hoy pienses en la bondad de Dios, recuerda que su corazón es para ti. No hay nada bueno en él que tú no hayas recibido también a través de su Hijo. Gracias, Dios, por ser un buen Padre para mí.
Oración:
Gracias porque soy uno de los tuyos: soy tu hija y nada puede cambiar eso. Ayúdame a no dudar de tu amor, sino a andar en el poder de saber quién soy en ti.
I Am Yours
He predestined us for adoption to sonship through Jesus Christ, in accordance with his pleasure and will—to the praise of his glorious grace, which he has freely given us in the One he loves. EPHESIANS 1:5-6
No matter what life gives to you, or what it takes from you, one thing is sure. You are a child of God and nothing can change that truth. He paid a high price for your soul. Whether you feel worthy of his love or not, you’re wrapped up in it.
He is a good Father. He delights in being kind to you. He inhabits your praise and he enjoys your prayers. There is so much power in understanding your identity as a child of God. As you dwell on the goodness of God today, remember that his heart is for you. There is no good thing in him that has not been extended to you through his Son.
Prayer:
Thank you, God, for being a good Father to me. Thank you that I am one of yours—that I am your child and nothing can change that.
Help me not to doubt your love but instead to walk in the power of knowing who I am in you.