Todos sabemos lo que es ser tratado de manera incorrecta o injusta; que hablen de ti o mientan acerca de ti. Es fácil ofenderse y sentir que tenemos el derecho de sentirnos así. Pero esta es una trampa destructiva.
Vamos a remover hoy esa ofensa de nuestros corazones.
Estar ofendido atrapa y encarcela nuestro corazón, produciendo amargura. Skandalon (ofensa) es el disparador de una trampa con buena carnada. Cuando un animal toca el gatillo de una trampa, cae sobre él y queda atrapado. Cuando te ofendes, eres el atrapado en esa trampa. El saber y pensar en esto te empoderará para mantenerte fuera de las trampas.
Sentirse ofendido proviene de la propia justicia. Pensamos: “¿Cómo pudieron hacerme eso? ¡Yo nunca lo hubiera hecho!”. Pero todos hemos pecado. Abraza la humildad con el pleno conocimiento de que tú también has fallado. Y la ofensa pierde el dominio sobre ti.
¡No puedes darte el lujo de prestarle atención!
1 Corintios 13: 5, dice: “El amor (el amor de Dios en nosotros) no es receloso ni impaciente ni resentido” ¿Por qué? “Porque no presta atención a un mal sufrido”. Nos ofendemos cuando prestamos atención al mal que hemos sufrido. Deja de prestarle atención. El precio es muy alto.
Exprésate ARRIBA, no AFUERA. Expresa completamente tu enojo y dolor en voz alta a Dios. Dile cuánto te duele. Perdona al ofensor (en voz alta a Dios), ya sea que sientas algo o no; y pídele a Él que te cure.
Todo lo que se guarda en el corazón, lo envenena y va matando lentamente tu gozo.
Efesios 4:31
Sea quitada de vosotros toda amargura, enojo, ira, gritos, maledicencia, así como toda malicia.
Oración:
Mi Señor, no permitas que caigamos en la trampa del enemigo, haznos fuertes en nuestras debilidades y derrama de tu sabiduría para poder afrontar las ofensas como tu lo harías, perdonando aquellos que nos hieren y no guardar rencor, somos determinados y renunciamos a todo lo malo guardado en el corazón y nos declaramos libres porque tu gracia nos ayuda a vencer, queremos ser como tu mi Dios, en el nombre de Jesús!
Break free from the trap of Offense
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We all know what it’s like to be treated wrongly or unfairly; talk about you or lie about you. It’s easy to get offended and feel like we have a right to feel that way. But this is a destructive trap.
Let’s remove that offense from our hearts today.
Being offended traps and imprisons our hearts, producing bitterness. Skandalon (offense) is the trigger of a well-baited trap. When an animal touches the trigger of a trap, it falls on it and is trapped. When you are offended, you are the one caught in that trap. Knowing and thinking about this will empower you to stay out of the traps.
Feeling offended comes from self-righteousness. We thought, “How could they do that to me? I would never have done it!” But we have all sinned. Embrace humility with the full knowledge that you too have failed. And the offense loses control over you.
You can’t afford to pay attention to it!
1 Corinthians 13:5 says, “Love (God’s love in us) is not suspicious or impatient or resentful.” Why? “Because he does not pay attention to a wrong suffered.” We are offended when we pay attention to the evil we have suffered. Stop paying attention to him. The price is too high.
Express yourself UP, not OUT. Fully express your anger and pain out loud to God. Tell him how much it hurts. Forgive the offender (out loud to God), whether you feel anything or not; and ask Him to heal you.
Everything that is kept in the heart, poisons it and slowly kills your joy.
Ephesians 4:31
Be removed from you all bitterness, anger, anger, shouting, slander, as well as all malice.
Prayer:
My Lord, do not allow us to fall into the trap of the enemy, make us strong in our weaknesses and pour out your wisdom to be able to face offenses as you would, forgiving those who hurt us and not holding grudges, we are determined and we renounce everything evil kept in our hearts and we declare ourselves free because your grace helps us to overcome, we want to be like you my God, in the name of Jesus!
