RENDIDOS A DIOS

Les ruego que dediquen toda su vida a servirle y a hacer todo lo que a él le agrada. ROMANOS 12:1,


El Señor no solo quiere cosas de nosotros, nos quiere a nosotros. Su deseo no es simplemente que hagamos sacrificios, sino que nos rindamos totalmente a Él para poder usarnos. Esto significa que lo que debemos llevar hoy delante del altar no son tan solo nuestros actos externos. No solo se trata del diezmo, de un hábito particular o de algún objeto preciado. Nuestro corazón (mejor dicho, todo acerca de nosotros) es el sacrificio que el Padre celestial demanda. Recordemos lo que el Señor declara: «Misericordia quiero, y no sacrificio, y conocimiento de Dios más que holocaustos» (Oseas 6:6). La palabra para misericordia es la expresión hebrea chesed y puede traducirse como amor, bondad, lealtad y fidelidad. Se trata de amor expresado a través de una vida piadosa y tiene su origen en una relación con el Padre. Es una palabra íntimamente asociada con el carácter de Dios, y de eso se trata: Él desea que reflejemos su carácter (Romanos 8:29). Dios desea que su fruto espiritual de amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre y templanza fluya a través de nosotros (Gálatas 5:22–23). Eso es siempre para Él mucho más importante que sacrificios externos.

Oración:
Jesús, te pertenezco. No sé todo lo que esto significa, pero enséñame a rendirme por completo a ti. Amén.


SURRENDERED TO HIM

Offer yourselves as a living sacrifice to God, dedicated to his service and pleasing to Him. ROMANS 12:1

The Lord doesn’t just want things from you—He wants you. His desire is not merely for you to make sacrifices, but for you to be fully surrendered for His use. This means it’s not just your external acts that need to be put on the altar today. It is not just your tithe, a particular habit, or some treasured object. Your heart—in fact, everything about you—is the sacrifice your heavenly Father requires. Remember, the Lord says, “I delight in loyalty rather than sacrifice, and in the knowledge of God rather than burnt offerings” (Hosea 6:6). The word for loyalty is the Hebrew word chesed, and it can be translated as love, goodness, kindness, and faithfulness. It is love that expresses itself through a godly life and has its root in a relationship with the Father. This is a word closely associated with the character of God, and that’s the point—He wants you to reflect His character (Romans 8:29). God wants His spiritual fruit of love, joy, peace, patience, kindness, goodness, faithfulness, gentleness, and self-control to flow through you (Galatians 5:22–23). To Him, that is always far more important than outward sacrifices.

Oración:
Jesus, I am Yours. Teach me to surrender myself to You fully. Amen.