Dios ha revestido a su iglesia con poderosos y hermosos dones, talentos y ministerios, a cerca de ellos debemos ser instruidos y aprender para glorificar a Dios con lo que él mismo nos ha dado.
A cerca de la profecía hay muchas cosas que estudiar y aprender, pues además estamos en tiempos finales. No debemos desechar la profecía sino capacitarnos para juzgarla correctamente, pues la Biblia misma nos dice:
1 Tesalonicenses 5:20-21
“No menospreciéis las profecías. Examinadlo todo, retened lo bueno”.
El Don de la Profesia:
La palabra profecía se traduce del griego “profeteia”, que también significa: “Proclamación de la mente y consejo de Dios”.
Entonces vemos que:
a) La profecía no es primeramente predicción.
b) La Escritura misma es una profecía, pues fue escrita por hombres inspirados por el Espíritu Santo y en ella encontramos el consejo sabio de Dios, por eso dice:
“tenemos la palabra profética más segura” 2 Pedro 1:19-21.
c) El don de la profecía debe distinguirse del ministerio de profeta.
Nota: Al estudiar el Don de Profecía, debe distinguirse claramente la diferencia entre el Don propiamente dicho y el Ministerio del profeta, que en la Escritura aparecen bien diferenciados, veamos:
Éste don (el don profético) es nuevo y particular del Nuevo Testamento dado a la iglesia para la edificación de la misma.
No debe confundirse la predicación con la profecía, pues se le quita la sobrenaturalidad al don profético (la predicación proclama, expone la Escritura, enseña la verdad de Dios, mientras que la profecía dice lo que Dios está diciendo).
Cualquier persona puede poseer el Don de profecía y ser usado por el Señor, pero esto no quiere decir que en verdad cumple con el ministerio de Profeta, por ejemplo en Hechos 21:8-11, vemos a un profeta llamado Agabo (esto es un ministerio de profeta), mientras que las hijas de Felipe fluían en el don de la profecía.
El escritor de Hechos (Lucas) nos dice que ellas “profetizaban” (podían hacerlo por el don) pero Agabo era profeta, éste era su ministerio, su oficio (y es a través de éste que Dios habla a Pablo).
4º) Beneficios y cuidados con el don de la profecía: 1 Corintios 14:3-4
a. Para hablar a los hombres sobrenaturalmente.
b. Para que todos sean enseñados
(1 Corintios 14:31)
c. Para convencer al inconverso y manifestar los secretos de su corazón (1ª Corintios 14:21-25).
d. Pablo indica que el que profetiza es responsable por el uso del don y tiene control sobre él, y que todo sea hecho en orden, (1 Cor. 14:32-33, 39-40).
Principios a tener en cuenta:
La profecía debe edificar, exhortar y consolar, (1 Corintios 14:3).
1º) Edificación: esto indica que es un mensaje que produce crecimiento.
2º) Exhortación: apremiar, impulsar para seguir un curso de conducta, Ejemplo Hch. 14:22.
3º) Consolación: indica alivio, aliento, consolación de manera entrañable, consuelo para el quebrantado y fatigado.
b) La profecía debe ser juzgada, (1 Cor. 14:29).
Nota 1: En 1 Cor. 13:9, vemos que la profecía no es completa, y según 1 Tesal. 5:20-21, no se debe menospreciar, sino juzgar, esta palabra significa: discernir, examinar. En la N.V.I. dice: “no desprecien las profecías, sométanlo todo a prueba”.
Las visiones, sueños o mensajes proféticos deben someterse a examen y comprobarlos por la palabra de Dios y por el testimonio del Espíritu Santo que mora en cada uno de nosotros.
Nota 2: En la iglesia de Corinto había desorden, y por eso, se establece un orden, 1 Cor. 14:30-32,40, nos dice la Biblia “decentemente”, el término indica: honestidad, con gracia, manera apropiada, noble, bien formado, honradez (en contraste con la vida de los gentiles).
c) La profecía viene para confirmación (de aquello que Dios ya ha venido diciendo al espíritu o al corazón del creyente).
d) La profecía o mensaje de Dios conserva la naturaleza Divina, (1 Cor. 14:33).
Nota: El mensaje de Dios (la profecía) contiene los elementos de la esencia de Dios mismo, como su amor, su paz, su verdad, su pureza, etc. La profecía no da ministerios, ni dones Espirituales (los confirma), ni “revela” el número de la lotería, ni te manda a desobedecer la Palabra del Señor, la palabra profética no confunde, ella trae luz pues viene de Dios.
Oración:
Padre Amado nos has llamado como una iglesia gloriosa, revestida de gracia y poder donde tu diestra nos capacita de dones y talentos para manifestar tu reino aquí en la tierra, y este es el tiempo que se levantan tus profetas en dones y ministerios a escuchar y declarar según el rugir de tu voz; empoderados y equipados para esta temporada, en el nombre de Jesús, Amén.
The prophecy!
God has clothed his church with powerful and beautiful gifts, talents and ministries, about them we must be instructed and learn to glorify God with what he himself has given us.
About prophecy there are many things to study and learn, because we are also in the end times. We must not discard prophecy but train ourselves to judge it correctly, for the Bible itself tells us:
1 Thessalonians 5: 20-21
Do not despise the prophecies. Examine everything, hold fast what is good. “
The Gift of Profession:
The word prophecy is translated from the Greek “prophecy”, which also means: “Proclamation of the mind and counsel of God.”
So we see that:
a) Prophecy is not primarily prediction.
b) The Scripture itself is a prophecy, as it was written by men inspired by the Holy Spirit and in it we find the wise counsel of God, that is why it says:
“We have the most sure prophetic word” 2 Peter 1: 19-21.
c) The gift of prophecy must be distinguished from the ministry of a prophet.
Note: When studying the Gift of Prophecy, the difference between the Gift itself and the Ministry of the prophet must be clearly distinguished, which in Scripture appear well differentiated, let’s see:
This gift (the prophetic gift) is new and particular to the New Testament given to the church for the edification of the same.
Preaching should not be confused with prophecy, since the supernaturality of the prophetic gift is taken away (preaching proclaims, exposes Scripture, teaches God’s truth, while prophecy says what God is saying).
Anyone can possess the Gift of prophecy and be used by the Lord, but this does not mean that he actually fulfills the ministry of a Prophet, for example in Acts 21: 8-11, we see a prophet named Agabus (this is a prophet ministry), while Philip’s daughters flowed in the gift of prophecy.
The writer of Acts (Luke) tells us that they “prophesied” (they could do it by the gift) but Agabus was a prophet, this was his ministry, his office (and it is through this that God speaks to Paul) .
4th) Benefits and cares with the gift of prophecy: 1 Corinthians 14: 3-4
to. To speak to men supernaturally.
b. For all to be taught
(1 Corinthians 14:31)
c. To convince the unbeliever and reveal the secrets of his heart (1 Corinthians 14: 21-25).
d. Paul indicates that the one who prophesies is responsible for the use of the gift and has control over it, and that everything is done in order (1 Cor. 14: 32-33, 39-40).
Principles to keep in mind:
Prophecy should edify, exhort, and comfort, (1 Corinthians 14: 3).
1st) Building: this indicates that it is a message that produces growth.
2º) Exhortation: to urge, to impel to follow a course of conduct, Example Acts. 14:22.
3rd) Consolation: indicates relief, encouragement, consolation in an endearing way, consolation for the broken and weary.
b) Prophecy must be judged, (1 Cor. 14:29).
Note 1: In 1 Cor. 13: 9, we see that the prophecy is not complete, and according to 1 Thessal. 5: 20-21, not to be despised, but to judge, this word means: discern, examine. In the N.V.I. He says: “do not despise the prophecies, put everything to the test.”
The visions, dreams or prophetic messages must be examined and verified by the word of God and by the testimony of the Holy Spirit who indwells each one of us.
Note 2: In the Corinthian church there was disorder, and therefore, an order is established, 1 Cor. 14: 30-32,40, the Bible tells us “decently”, the term indicates: honesty, with grace, proper manner, noble, well formed, honesty (in contrast to the life of the Gentiles).
c) Prophecy comes for confirmation (of what God has already been saying to the spirit or heart of the believer).
d) The prophecy or message of God preserves the Divine nature, (1 Cor. 14:33).
Note: God’s message (prophecy) contains the elements of the essence of God himself, such as his love, his peace, his truth, his purity, etc. Prophecy does not give ministries, nor Spiritual gifts (it confirms them), nor does it “reveal” the lottery number, nor does it command you to disobey the Word of the Lord, the prophetic word does not confuse, it brings light because it comes from God.
Prayer:
Beloved Father you have called us as a glorious church, clothed with grace and power where your right hand equips us with gifts and talents to manifest your kingdom here on earth, and this is the time that your prophets rise up in gifts and ministries to listen and declare according to the roar of your voice; empowered and equipped for this season, in Jesus name, Amen.
