«Pero todo esto ha sucedido para que se cumplan las Escrituras de los profetas». Entonces todos los discípulos lo abandonaron y huyeron. MATEO 26:56
Al igual que los discípulos cuando Jesús fue arrestado, puede que te encuentres en una situación que parezca completamente abrumadora. No te desesperes: Dios tiene el control. Cuando Pilato le preguntó a Jesús: «¿No sabes que tengo autoridad para soltarte, y que tengo autoridad para crucificarte?», Cristo le respondió: «Ninguna autoridad tendrías sobre Mí si no se te hubiera dado de arriba» (Juan 19:10-11). Más adelante, Jesús les aseguró a sus discípulos que ni siquiera un gorrión —que solo vale una monedita— podría caer al suelo si no fuera por la voluntad del Padre (Mateo 10:29). Sea grande o pequeña la circunstancia, Dios tiene el control absoluto.
Debemos darnos cuenta de que nada puede tocarnos excepto lo que el Padre permite. A veces eso incluye dificultades, las que nos hacen preguntarnos: ¿Cómo es posible que esto sea bueno? Sin embargo, muchas personas que han pasado por tremendas pruebas pueden decir: «Odié la dificultad mientras la atravesaba. Pero desde este lado, puedo ver por qué Él lo permitió». Dios tiene sus propósitos y en su tiempo perfecto nuestras tribulaciones traerán bendición. Ese fue ciertamente el caso de la crucifixión de Cristo, la cual compró nuestra salvación.
Oración:
Mi Salvador, confío en ti. Que tu voluntad se cumpla en mi vida. Amén.
In the Plan
“All this has taken place to fulfill the Scriptures of the prophets.” Then all the disciples left Him and fled. MATTHEW 26:56
Like the disciples when Jesus was arrested, you may be in a situation that appears completely overwhelming. Do not despair—God is in control. When Pilate asked Jesus, “Do You not know that I have authority to release You, and I have authority to crucify You?” Christ answered him, “You would have no authority over Me, unless it had been given you from above” (John 19:10–11). Earlier, Jesus reassured His disciples that not even a common sparrow—worth only half a penny—could fall to the ground apart from the Father’s will (Matthew 10:29). Whether the circumstance is large or small, God is in absolute control.
We must realize that nothing can touch us except what the Father allows. Sometimes that includes hardship, which leaves us wondering, How can this possibly be good? Yet many people who have gone through tremendous trials can say, “I despised the difficulty while I was going through it. But on this side of it, I can see why He allowed it.” God has His purposes and with perfect timing will bring blessing from our tribulations. That was certainly the case for Christ’s crucifixion, which purchased our salvation.
Prayer:
My Savior, I trust You. May Your will be fulfilled in my life. Amen.
