Elegida

El Señor Soberano me ha dado sus palabras de sabiduría, para que yo sepa consolar a los fatigados. Mañana tras mañana me despierta y me abre el entendimiento a su voluntad. 
ISAÍAS 50:4 

Es fácil preguntarse si tenemos un papel significativo en el reino de Dios. Nos cuestionamos nuestra propia utilidad porque nos sentimos débiles, inconstantes e incapaces de representar al perfecto Salvador del mundo. Pero Dios nos da la oportunidad de enseñar a otros. Él llena nuestra boca con las palabras necesarias para dar vida. Puede que nosotros mismos, por nosotros mismos, seamos débiles e inadecuados, pero el Señor ha compensado nuestras incapacidades más que de sobras.

Dios te ha elegido para que seas su mensajera: las manos, los pies y la boca que traen su gloria a los demás. Él sabe que no eres perfecta, pero él te está perfeccionando en cada momento a través de su gracia y su amor redentor. Aprende con ansia de él y sírvele con pasión. Tu huella será más grande de lo que crees.

Oración:
Gracias, Jesús, por elegirme para dejar mi huella en este mundo para ti. Gracias por los dones que me has entregado. Ayúdame a ser fiel a la hora de enseñar a los demás lo que he aprendido de tu amor.


Chosen

The LORD GOD gave me the ability to teach so that I know what to say to make the weak strong. Every morning he wakes me. He teaches me to listen like a student. 
ISAIAH 50:4 NCV 

It’s easy to wonder if we play a significant part in the kingdom of God. We question our own usefulness because we feel weak, inconsistent, and incapable of representing the perfect Savior of the world. But God gives us the ability to teach others. He fills our mouths with the words needed to bring life. In and of ourselves we may be weak and inadequate, but the Lord has more than compensated for our inabilities.

God has chosen you to be his messenger: the hands and feet and mouthpiece of his glory. He knows that you aren’t perfect, but he is perfecting you every single moment through his grace and his redemptive love. Learn from him eagerly and serve him passionately. Your impact reaches further than you know.

Prayer:
Thank you, Jesus, for choosing me to impact the world for you. Thank you for the gifts I have through you. Help me to be faithful to teach others what I’ve learned from your love.