Día 78 • Aguafiestas

No aceptaré sus ofrendas quemadas ni sus ofrendas de grano. Ni siquiera prestaré atención a sus ofrendas selectas de paz. 
(AMÓS 5.22, NTV)

Tu abuela te está celebrando la fiesta de cumpleaños más fantástica del mundo. ¿Imaginas cómo organizarla? ¡Paseos en helicóptero! ¡Asombroso!

Sin embargo, llega el gran día, y aparecen varios compañeros de clase no tan amables. Al parecer, los niños que te intimidan se enteraron del asunto de los helicópteros y engatusaron a tu abuela para que los dejara asistir.

¡Estás disgustado! No quieres que ese tipo de gente, que finge que te agradan solo por poder montar en helicóptero, en tu fiesta. Quieres amigos de verdad a quienes les importas de verdad.

Dios también es así. Cuando las personas acuden a la iglesia, cantan alabanzas, ofrendan dinero y donan tiempo y talentos a la comunidad, no quiere que lo hagan por falsedad o para impresionar. Dios quiere que estemos allí porque lo amamos.

Los israelitas fueron culpables en ocasiones de ser unos farsantes. Iban a la iglesia, sacrificaban ofrendas quemadas, pero sus corazones no eran sinceros. Y no convencían a Dios. «Yo aborrezco sus fiestas religiosas» (Amós 5.21a).

Es maravilloso dar tiempo, dinero, esfuerzos y talentos a Dios. Pero si haces estas cosas para lograr las felicitaciones de los demás, lo has entendido al revés. Dios no quiere que seas el aguafiestas; quiere tu compromiso y tu amistad.

Oración:

Señor, no quiero que mis «regalos» para ti sean falsos. Quiero que procedan de lo profundo de mi corazón. ¿Me ayudarás mientras voy aprendiendo a ser genuino contigo?


Day 78 • Party Crashers

Even though you bring me burnt offerings and grain offerings, I will not accept them. Though you bring choice fellowship offerings, I will have no regard for them. (AMOS 5:22) 

Your grandma is throwing you the coolest-ever birthday party. Guess how you get to celebrate? Helicopter rides! Awesome!

But when the big day comes, several not-so-nice classmates show up. Apparently, the bullies heard about the helicopters and sweet-talked your grandma into letting them come.

You’re upset! You don’t want people at your party who pretend to like you just so they can ride helicopters. You want real friends who actually care.

God is the same way. When people go to church, sing worship songs, give money, and donate time and talents to the community, he doesn’t want it to be fake or for show. God wants us to be there because we love him.


The Israelites were sometimes guilty of being frauds. They went to church and sacrificed burnt offerings, but their hearts weren’t sincere. And God wasn’t buying it. “I hate, I despise your religious festivals” (Amos 5:21a).

It’s great to give time, money, efforts, and talents to God. But if you’re doing those things to get kudos from others, you’ve got it backward. God doesn’t want you to crash the party—he wants your commitment and friendship.


Prayer:
Lord, I don’t want my “presents” to you to be fake. I want them to be from my heart. Will you help me as I learn to be real with you?