Día 23 – Sin comparaciones

Y a uno le dio cinco talentos, a otro dos, y a otro uno, a cada uno conforme a su capacidad; y se fue de viaje. 
(MATEO 25.15, LBLA)

Pies ligeros. Respuestas astutas. Brazos fuertes. Sonrisa encantadora. ¿Has visto a otros niños con estas características y desearías tener lo mismo que ellos? Si todos tuvieran el mismo cerebro, la misma velocidad, la misma inteligencia, la misma fuerza, el mundo sería aburrido. Todo el mundo sería exactamente igual. ¿Te lo puedes imaginar? Cada vez que jugaras a algo con tu amigo, quedaríais empatados. Te cansarías de ello muy pronto.

Nadie más tiene la misma combinación de familia, amigos, personalidad y capacidades que tú. Así es como Dios quiere que seas. No pi”rdas el tiempo mirando lo que otra persona tiene.

¿Qué te ha dado Dios a ti? Puedes desear que tu familia tuviera más dinero y así poder vivir en una casa más grande. Sin embargo, Dios te ha colocado exactamente donde estás para que puedas servir a las personas de tu vecindario. O quizás te gustaría ser mejor en los deportes, pero es posible que Dios quiera que tiendas la mano a alguien que esté sentado en la línea de banda, para que esa persona pueda saber del amor de Dios.

Lo que Dios te haya dado es exactamente lo que quiere que tengas. Desear tener aquello de lo que otro dispone es como decirle a Dios que no te hizo suficientemente bien.

Oración

Señor, a veces desearía ser más listo o más guapo. En ocasiones resulta difícil aceptarme tal como me hiciste. ¿Me recordarás lo especial que soy para ti?


Day 23 – No Comparisons

To one he gave five bags of gold, to another two bags, and to another one bag, each according to his ability. Then he went on his journey. 
(MATTHEW 25:15)

Fast feet. Clever comebacks. Strong arms. Charming smile. Ever see other kids with these characteristics and wish you had what they did? If everyone had the same brains, the same speed, the same wit, the same strength, the world would be boring. Everyone would be exactly the same. Can you imagine that? Every time you played a game with your friend, you’d tie. You’d get tired of that pretty fast.

No one else has the combination of family, friends, personality, and abilities you do. That’s how God wants it. Don’t waste your time look”ng at what someone else has.

What has God given you? You may wish your family had more money so you could live in a bigger house. But God put you right where you are so you could serve the people In your neighborhood. Or, you may wish you were better at sports, but God may want you to reach out to someone else who’s sitting on the sidelines so that person can know about God’s love.

Whatever God has given you is exactly what he wants you to have. Wishing you had what someone else does is like telling God that he didn’t make you good enough.

Prayer

God, sometimes I wish I were smarter or better looking. Sometimes it’s hard to accept how you made me. Will you remind me how special I am to you?