Día 21 – Absolutamente relevante

Tú, Belén Efrata, eres pequeña para estar entre las familias de Judá; pero de ti me saldrá el que será Señor en Israel. Sus orígenes se remontan al principio mismo, a los días de la eternidad. 
(MIQUEAS 5.2, RVC)

«Oh aldehuela de Belén» es un villancico que se canta cada Navidad. Es posible que conozcas la letra, ¿pero te das cuenta del hecho asombroso que celebra?

Jesucristo nació en aquella pequeña ciudad que se encuentra a unos doce kilómetros de Jerusalén. Casi todo el mundo sabe esto. Sin embargo, no todos saben que se trata de la misma pequeña aldea donde nació el rey David.

El profeta Miqueas predijo que el Mesías de Israel nacería en Belén. Escribió su predicción varios centenares de años después de que David naciera y varios siglos antes de que Jesús viniera al mundo.

No obstante, lo que hace sobresaltar a esta pequeña ciudad es precisamente que Belén era una aldea sin importancia. Sus habitantes no eran ricos ni famosos, ni tenían un nivel alto de educación. A pesar de ello, Dios decidió usar esta ciudad tan corriente e insignificante para llevar a cabo su sorprendente plan para nuestro planeta.

¿Te cuestionas alguna vez tu relevancia? ¿Te preguntas a veces si Dios te usará? En días así, empieza a cantar la letra de «Oh aldehuela de Belén». No te importe que no sea Navidad. Es un himno con verdad que se puede cantar a lo largo de todo el año.

Oración

Señor, estoy sorprendido de que Jesús naciera en Belén. Me siento agradecido porque usas lugares y personas desconocidos para tus grandes planes.


Day 21 – Totally Significant

But you, Bethlehem Ephrathah, though you are small among the clans of Judah, out of you will come for me one who will be ruler over Israel, whose origins are from of old, from ancient times. 
(MICAH 5:2)

“O Little Town of Bethlehem” is a carol sung every Christmas. You might know the words, but do you notice the amazing fact it celebrates?

Jesus Christ was born in that little town eight miles outside of Jerusalem. Most everybody knows that. But not everybody knows it was the same little town where King David was born.

The prophet Micah predicted that Israel’s Messiah would be born in Bethlehem. He wrote his prediction several hundred years after David was born and several hundred years before Jesus was.

But what really puts that little town on the map is this: Bethlehem was a nothing town. The people there weren’t wealthy, famous, or highly educated. Yet God chose to use this very ordinary, insignificant town to bring about his amazing plan for our planet. Do you ever question your significance?

Do you ever wonder if God will use you? On days like that, start singing the words to “O Little Town of Bethlehem.” Don’t worry if it isn’t Christmas. It’s a hymn with truth that’s sing-able all year long.

Prayer

Lord, I’m amazed that Jesus would be born in Bethlehem. I’m grateful that you use unknown places and people for your big plans.