Jonás se fue, pero en dirección a Tarsis, para huir del SEÑOR. Bajó a Jope, donde encontró un barco que zarpaba rumbo a Tarsis. Pagó su pasaje y se embarcó con los que iban a esa ciudad, huyendo así del SEÑOR.
(JONÁS 1.3)
Estás harto y cansado de las normas de tus padres. Sencillamente no te entienden. Así que preparas una mochila y te diriges hacia la puerta. ¿Hasta dónde irías para escapar de ellos?
Jonás no estaba huyendo de sus padres, pero con toda seguridad estaba furioso. Dios quería que fuera a hablar de su amor a esos malvados y canallas corruptos de Nínive. ¡De ninguna de las maneras! Jonás no quería hacerlo. Escaparía antes de visitar siquiera aquella ciudad.
¿Puedes entender cómo se sentía? Sencillamente no parecía justo darles a los ninivitas una segunda oportunidad de enderezarse. Habían cometido demasiadas ofensas y demasiadas veces.
Dios entendía cómo se sentía Jonás, de modo que primero permitió que el profeta huyera. Le dejó ir lo suficientemente lejos hasta que Jonás empezó a replantearse sus elecciones. ¡El vientre apestoso de un gran pez era un lugar asqueroso adonde escapar!
Cuando no entiendes algo que Dios o tus padres te piden que hagas, háblalo con Dios. Desahoga tu frustración. No la contengas; de otro modo podrías huir y acabar en un apestoso desastre.
Oración:
Señor, ¿por qué hay tantas normas en casa, en la escuela y en la iglesia? Parece ser que las normas, normas, normas están por todas partes. Sé que supuestamente están hechas para ayudarme y protegerme, pero necesito fe para creer que esto es verdad.
Day 120 • Running Away
But Jonah ran away from the LORD and headed for Tarshish. He went down to Joppa, where he found a ship bound for that port. After paying the fare, he went aboard and sailed for Tarshish to flee from the LORD.
(JONAH 1:3)
You are sick and tired of your parents’ rules. They just don’t understand you. So you pack a bag and head for the door. How far would you go to run away?
Jonah wasn’t running away from his parents, but he sure was mad. God wanted him to go tell the no-good, rotten scoundrels of Nineveh about God’s love. No way! Jonah wouldn’t do it. He’d run away before ever visiting Nineveh.
Can you understand how he felt? It just didn’t seem fair to give the Ninevites a second chance to straighten up. They’d done too much wrong too many times.
God understood how Jonah felt, so God let Jonah run away. He let Jonah go far enough until Jonah started rethinking his choices. The smelly belly of a big fish was a lousy place to run away to!
When you don’t understand something that God or your parents ask you to do, talk it over with God. Vent your frustration. Don’t hold it in; otherwise you might run away and wind up in a stinking mess.
Prayer:
God, why are there so many rules at home, at school, and at church? It seems like rules, rules, rules are everywhere. I know they are supposed to help and protect me, but I need faith to believe that’s true.