El Padre mismo os ama, porque vosotros me habéis amado. JUAN 16:27
¿Estamos conscientes de que Dios desea comunicarnos diariamente su gran amor? El Señor quiere hacernos saber cuánto significamos para Él y cuánto se deleita en relacionarse con nosotros. Su amor puede llegarnos en forma de una bendición o provisión inesperada, de una llamada de un ser querido, de la bondad de un extraño, de un pasaje bíblico favorito o una canción, o del abrazo de un niño. Sea lo que sea, cada día Dios tiene una manera nueva de mostrar lo profundamente preocupado que está por nosotros.
Sin embargo, a menudo podríamos perdernos las insinuaciones del Señor porque no las buscamos o porque evitamos la comunión con Él. Nos quejamos de lo que nos falta y nos enfocamos tanto en nuestros problemas y nuestras cargas que nos olvidamos de escucharlo. Al proceder así desperdiciamos todas las razones que Él nos ha dado para alegrarnos… y son muchas.
No haga eso; más bien, esté atento al amor de Dios. El Amante de su alma nunca se queda sin maneras únicas y profundamente conmovedoras de decirle que usted le interesa. Esté atento y sea agradecido, porque hay muchas cosas maravillosas que Él desea comunicarle.
Oración:
Jesús, ¡gracias por amarme! Me alegro por todas las maneras en que te preocupas por mí. Amén.
WATCH FOR LOVE
“The Father Himself loves you, because you have loved Me.” JOHN 16:27
Do you realize that God desires to communicate His great love to you on a daily basis? He wants you to know how much you mean to Him and how He delights in having a relationship with you. His love may come to you in the form of an unexpected blessing or provision, a call from a loved one, the kindness of a stranger, a favorite Scripture or song, or a hug from a child. Whatever it may be, each day God has a new way of showing how profoundly He cares for you.
Often, however, we might miss out on the Lord’s overtures because we’re not looking for them or are avoiding fellowship with Him. We complain about what we lack and become so focused on our problems and burdens that we forget to listen to Him. But when we do, we miss all the reasons He’s given us to rejoice—and they are many.
Don’t do that; instead, watch for His love. The Lover of your soul never runs out of unique and profoundly touching ways to tell you that He cares about you. So be on the lookout and be grateful. Because there are so many wonderful things He wants to say to you.
Prayer:
Jesus, thank You for loving me! I rejoice in all the ways You care for me. Amen.
