¡Las Adversidades!

Isaías 43:2

Cuando pases por aguas profundas, yo estaré contigo. Cuando pases por ríos de dificultad, no te ahogarás. Cuando pases por el fuego de la opresión, no te quemarás; las llamas no te consumirán.

Dios no se opone a que existan adversidades en la vida de sus hijos, estas cumplen con el propósito de ayudarnos a crecer y a madurar espiritualmente.

Sin adversidades o pruebas no aprenderíamos a ser vencedores, ni a fortalecernos en el Señor, ni tampoco a esforzarnos en la lucha cotidiana para impulsarnos a vivir en una dimensión nueva que nos permita experimentar lo sobrenatural de Dios.

En sí, las adversidades no representan un problema; el problema puede surgir en la actitud que tomemos frente a ellas. Si pretendemos enfrentarlas en nuestra humanidad, la derrota estaría haciendo mella en nuestra vida espiritual; más sin en cambio, si las enfrentamos con las armas de la milicia que Dios nos da, estaremos saliendo adelante ante ellas, pues nuestras armas son poderosas para derrotar y destruir fortalezas, principados y toda adversidad en contra nuestra. 

(2 Co. 10:3-5)

Las adversidades son también una oportunidad para acercarnos a Dios y aprender a confiar en su fidelidad.

Por eso el ayuno que usted ha empezado, no será en vano. Y en algún momento si empieza a llenarse tu mente con pensamientos como: “¿De qué sirve?… ¡Esto es una locura!”.

¡No desfallezca y humíllese al Señor, descanse en él y encontrarás refugió!.

Cuando Dios permite una prueba para tu vida, es porque te va a llevar a otra dimensión en donde vas a poder desarrollar tu máximo potencial.

Oración:
Amado Dios, sabemos que las cosas que nos suceden a los que amamos tu nombre, nos ayudan en nuestro crecimiento, para cumplir el propósito por el cual hemos sido llamados, por eso decidimos vivir cada proceso en tu Presencia, en ayuno y oración, sabiendo que a través de estos podemos salir victoriosos de cualquier adversidad, en el nombre de Jesús, amén.


The Adversities!

Isaiah 43: 2

When you pass through deep waters, I will be with you. When you pass through rivers of difficulty, you will not drown. When you go through the fire of oppression, you will not be burned; the flames will not consume you.

God does not oppose the existence of adversities in the lives of his children, they fulfill the purpose of helping us grow and mature spiritually.

Without adversity or trials, we would not learn to be victors, nor to strengthen ourselves in the Lord, nor to strive in the daily struggle to push ourselves to live in a new dimension that allows us to experience the supernatural of God.

In itself, adversity is not a problem; the problem may arise in the attitude we take towards them. If we try to face them in our humanity, defeat would be making a dent in our spiritual life; but on the other hand, if we confront them with the weapons of the militia that God gives us, we will be moving forward before them, because our weapons are powerful to defeat and destroy fortresses, principalities and all adversity against us.

(2 Cor. 10: 3-5)

Adversities are also an opportunity to draw closer to God and learn to trust in his faithfulness.

That is why the fast that you have started will not be in vain. And at some point if your mind starts to fill with thoughts like, “What’s the use? … This is crazy!”

Do not lose heart and humble the Lord, rest in him and you will find refuge!

When God allows a test for your life, it is because he is going to take you to another dimension where you will be able to develop your maximum potential.

Prayer:
Dear God, we know that the things that happen to those of us who love your name, help us in our growth, to fulfill the purpose for which we have been called, that is why we decided to live each process in your Presence, in fasting and prayer, knowing that through these we can emerge victorious from any adversity, in the name of Jesus, amen.