Aférrate a sus Promesas

Juan 20:29

Entonces Jesús le dijo: —Tú crees porque me has visto; benditos son los que creen sin verme.

En medio de grandes pruebas, es normal sentirse aislado, desilusionado y desvalido. Sin embargo, recuerde que usted no está solo. Aunque pudiera parecer como que toda esperanza ha desaparecido, resulta esencial que confíe en que su poderoso Libertador estará con usted siempre

(Deuteronomio 31.8).

Y Jehová va delante de ti; él estará contigo, no te dejará, ni te desamparará; no temas ni te intimides.

 No hay mejor ejemplo de esto que los discípulos después de la crucifixión. Aunque Jesús les había advertido lo que iba a suceder, no lo comprendieron por completo. Así que cuando vieron en la cruz a su amado Rabí, cedieron a la desesperanza. Apenas tres días más tarde, Él resucitó de los muertos y no solo restauró la fe de los discípulos, sino que la aumentó cien veces. No obstante, qué diferente habría sido el tiempo entre la crucifixión y la resurrección para ellos si simplemente se hubieran aferrado a las promesas del Salvador. Esto también es cierto para usted. Habrá dificultades cuando Dios no le provea las respuestas, pero él le consolará diciendo: «Confía en lo que he dicho». No se rinda a la oscuridad del momento, sino aférrese a la Palabra de Dios. Pronto verá que sus esperanzas también surgen de la tumba.

Oración;
Mi Señor! algunas veces nos sentimos desmayar al no ver nuestros sueños, metas y anhelos cumplirse pero tu nos enseñas que no perdamos las esperanzas que tus promesas son Si y Amén en nuestras vidas, que el poder de la resurrección se activa en cada uno de nosotros donde todos los sueños, metas, anhelos y todo lo tuyo resucita por tu poder para la gloria de tu nombre. En el nombre de Jesús. ¡Amén!


Hold on to His Promises.

John 20:29

Then Jesus said to him: —You believe because you have seen me; blessed are those who believe without seeing me.

In the midst of great trials, it is normal to feel isolated, disappointed, and helpless. However, remember that you are not alone. Although it may seem like all hope is gone, it is essential that you trust that your mighty Deliverer will be with you always.

(Deuteronomy 31.8).

And the Lord goes before you; he will be with you, he will not leave you, nor forsake you; do not fear or be intimidated.

 There is no better example of this than the disciples after the crucifixion. Although Jesus had warned them what was going to happen, they did not fully understand it. So when they saw their beloved Rabbi on the cross, they gave in to despair. Just three days later, He rose from the dead and not only restored the disciples’ faith, but increased it a hundredfold. Yet how different the time between crucifixion and resurrection would have been for them if they had simply held on to the promises of the Savior. This is also true for you. There will be difficulties when God does not provide the answers, but He will comfort you by saying, “Trust what I have said.” Don’t give in to the darkness of the moment, but hold on to God’s Word. You will soon see that your hopes also rise from the grave.

Prayer:
My Lord! Sometimes we feel faint when we do not see our dreams, goals and desires being fulfilled but you teach us not to lose hope that your promises are Yes and Amen in our lives, that the power of the resurrection is activated in each one of us where all dreams, goals, desires and everything of yours is resurrected by your power for the glory of your name. In the name of Jesus. Amen!