Día 27 • Pecados borrados

Si alguien peca inadvertidamente e incurre en algo que los mandamientos del SEÑOR prohíben, es culpable y sufrirá las consecuencias de su pecado. 
(LEVÍTICO 5.17, NVI)

¿Cómo te sientes cuando alguien te hiere? Tal vez un amigo cuenta una mentira sobre ti o un hermano te echa la culpa de haber roto un vaso en la cocina. Uno se siente fatal.


¿Sabes que nosotros le hacemos eso a Dios? Él lo creó todo, y es perfecto y bueno todo el tiempo. Lamentablemente, por las elecciones de Adán y Eva en el Jardín del Edén, las personas se vuelven contra Dios y lo hieren. Esto se llama pecado y es cuando actuamos mal o escogemos cosas que van contra la perfecta bondad de Dios. Y es como llamarle algo muy feo a Dios, que nos ama.


Las maravillosas noticias son que Dios no retiene nuestros pecados en contra nuestra. En el Antiguo Testamento, les proporcionó la forma a los israelitas para que hicieran las cosas bien. Podían traer ofrendas como forma de admitir su ofensa y expresar que lo lamentaban. Estas ofrendas debían ser sacrificios y serían el pago de sus pecados. En el Nuevo Testamento, Jesús vino para solucionar este problema para todos. Y, hoy día, podemos hacer lo mismo a través de la oración sincera.


Oración
Dios, sé que el pecado es algo que ocurre a diario, pero no me había dado cuenta de que te hería. Te ruego que me perdones por traicionarte.


Day 27 • Sins Erased

If anyone sins and does what is forbidden in any of the LORD’S commands, even though they do not know it, they are guilty and will be held responsible. (LEVITICUS 5:17)

How does it feel when somebody hurts you? Maybe a friend tells a lie about you or a sibling blames you for breaking a glass in the kitchen. It feels bad.


Do you know that we do that to God? God created everything, and he is perfect and good all the time. Sadly, because of Adam and Eve’s choices in the Garden of Eden, people turn on God and hurt him. This is called sin. Sin is when we do wrong or make choices against God’s perfect goodness. And it’s like calling God, who loves us, a very bad name.

The fantastic news is that God doesn’t hold our sins against us. In the Old Testament, he gave the Israelites a way to make things right. They could bring offerings as a way of admitting their wrong and saying they were sorry. These offerings were to be sacrifices and would be payment for their sins. In the New Testament, Jesus came along to make things right for everyone. And nowadays, we can do the same thing through sincere prayer.


Prayer :
God, I know that sin happens every day, but I didn’t realize it hurt you. Please forgive me for betraying you.