Dios misericordioso

Salmos 103:3 RVR1960
“Él es quien perdona todas tus iniquidades, El que sana todas tus dolencias”.

Recibir el perdón de Dios por nuestros fracasos y arrepentirnos sinceramente es el paso más importante para experimentar la restauración del Señor. En la Biblia, aprendemos sobre el rey David, quien cometió una ofensa grave, un pecado tanto contra los seres humanos como contra Dios. Cometió adulterio e intentó encubrir su pecado matando al esposo de Betsabé, Urías.

Sin embargo, a pesar de que David no merecía perdón o misericordia por sus malas acciones, él entendía la naturaleza de Dios. Sabía que Dios era bueno, y estaba siempre dispuesto a mostrar Su misericordia a Sus hijos (Salmo 51:1-2). Dios extendió Su gracia a David porque él estaba dispuesto a acercarse, listo para arrepentirse y preparado para servir a Dios.

¿Merecía David el perdón? Sí, David, como todos los seres humanos, era un pecador. Pero porque estaba dispuesto a arrepentirse y volver al camino correcto, Dios declaró Su amor, perdón y misericordia. Él es misericordioso y desea que también mostremos Su misericordia a los demás.

Al ser misericordiosos, reflejamos el carácter de Dios y cumplimos nuestro llamado. Comprometámonos con los valores fundamentales de la misericordia: respeto, integridad, justicia, compasión y servicio. Proverbios 28:13 dice: “El que encubre sus pecados no prospera, pero el que los confiesa y se aparta de ellos halla misericordia”.


ORACIÓN
Buen Padre, gracias por ofrecer siempre tu amor y perdón para mí. Anhelo caminar continuamente en Tus caminos y ayúdame a extender Tu amor y misericordia a los demás. En el nombre de Jesús. Amén.


Merciful God

Psalms 103:3 KJV

“He is the one who forgives all your iniquities, the one who heals all your diseases.”

Receiving God’s forgiveness for our failures and sincerely repenting is the most important step in experiencing the Lord’s restoration. In the Bible, we learn about King David, who committed a grave offense, a sin against both human beings and God. He committed adultery and attempted to cover up his sin by killing Bathsheba’s husband, Uriah.

However, even though David did not deserve forgiveness or mercy for his evil actions, he understood the nature of God. He knew that God was good, and he was always ready to show his mercy to his children (Psalm 51:1-2). God extended grace from him to David because he was willing to draw near, ready to repent, and prepared to serve God.

Did David deserve forgiveness? Yes, David, like all human beings, was a sinner. But because he was willing to repent and return to the right path, God declared his love, forgiveness and mercy for him. He is merciful and wants us to show his mercy to others as well.

By being merciful, we reflect God’s character and fulfill our calling. Let us commit to the core values of mercy: respect, integrity, justice, compassion and service. Proverbs 28:13 says, “He who covers his sins does not prosper, but he who confesses them and turns away from them finds mercy.”

PRAYER

Good Father, thank you for always offering your love and forgiveness to me. I long to continually walk in Your ways and help me extend Your love and mercy to others. In the name of Jesus. Amen.